Es la mayor secta pseudocristiana creada por la masonería a principos de los años sesenta (durante los papados de Juan XXIII y Pablo VI), a raíz del Conciliábulo Vaticano II, pero que ha cobrado un gran auge en la actualidad gracias a Jorge Mario Bergoglio (Papa Francisco), un hereje argentino al servicio de la élite mundial.
Desde su creación, la también conocida como Iglesia Bergogliana o Iglesia de Francisco, se ha ostentado como una organización católica, pero que en realidad es una cueva de ladrones, masones, herejes y homosexuales infiltrados.
Debido a su infiltración silenciosa en la Iglesia Católica, la iglesia masónica en muy poco tiempo logró apoderarse de los templos, colegios, universidades, hospitales y lugares de culto católicos en todo el mundo. Además de sus bienes e inmuebles, conserva y mantiene la misma estructura jerárquica de la iglesia católica, pero no practica la doctrina de Jesucristo.
Esta nueva religión ha arrastrado a sus filas a los más de 1000 millones de fieles católicos que hay en el mundo, debido a que la mayor parte de ellos siguen creyendo que se trata de la verdadera iglesia católica. Sólo un pequeño y reducido grupo de fieles católicos verdaderos (remanentes) han abierto los ojos a esta infiltración y se han separado a tiempo de esta falsa iglesia.
Rasgos que identifican a esta falsa iglesia que se dice católica, pero que en realidad es herética y cismática:
Promueve abiertamente la idolatría a través de misas y rituales chamánicos, de adoraciones a la Pachamama y a otras falsas deidades indigenistas que en realidad no son otra cosa que culto a los demonios.
Exige a sus fieles obedecer los mandatos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Prohibe las misas tradicionales en latín y da la comunión en la mano a sus fieles.
Actúa en contra de Dios y de la verdadera iglesia fundada por Jesucristo.
Permite que los supuestos sacerdotes hagan payasadas, escandalicen y bailen en el altar. En muchas ocasiones hasta los premia dándoles cargos más importantes.
Da la comunión y “bendice” a proabortistas, homosexuales y protestantes.
Crea nuevas formas de culto (misas chamánicas, ritos indigenistas, ecumenismo, etc.)
Utiliza a niñas (monaguillas) y mujeres en el altar, o les permite dar la comunión como ministras extraordinarias.
Ofende constantemente a la Santísima Virgen María y contradice a los grandes doctores de la iglesia.
Tiene convenios con los gobiernos de China, Nicaragua, o con países árabes y musulmanes, etc. para que puedan perseguir libremente a los católicos verdaderos.
Sus miembros son modernistas y promueven abiertamente la ideología de género, la homosexualidad, el supuesto derecho al aborto y el uso de anticonceptivos.
Muchos sacerdotes que creían estar en la verdadera iglesia católica fueron dándose cuenta de que en realidad estaban colaborando con esta nueva secta masónica. Aún así, la gran mayoría decidió continuar trabajando en esta nueva institución para no perder sus cargos, ingresos económicos y privilegios. La prueba definitiva llegó en el año 2020 para todos los sacerdotes de la iglesia católica, de tal manera que todos aquellos religiosos que a raíz de la falsa pandemia de COVID-19 han seguido trabajando y colaborando en la Iglesia de Bergoglio, son en realidad falsos sacerdotes católicos.
En cambio, a los sacerdotes que fueron sancionados por el Vaticano en el 2020 por no seguir los lineamientos plandémicos (dar la comunión en la mano, usar y exigir el cubrebocas, vacunas, etc.) y que se les prohibió ejercer su ministerio sacerdotal y se les removió de sus templos y parroquias… a todos estos perseguidos por la iglesia de Bergoglio se les considera verdaderos sacerdotes católicos.
Papas de la Iglesia Masónica Vaticana:
Juan XXIII (Angelo Giuseppe Roncalli)
Pablo VI (Giovanni Battista Enrico Antonio Maria Montini)
Juan Pablo II (Karol Józef Wojtyła)
Benedicto XVI
Francisco (Jorge Mario Bergoglio)
Otros miembros de la Iglesia Masónica Vaticana (pseudosacerdotes, obispos y cardenales) considerados modernistas, infiltrados, pseudocatólicos, papólatras, cismáticos y/o herejes:
Alberto Suárez Inda
Alfonso Gerardo Miranda Guardiola
Benjamín Castillo Plascencia
Carlos Gustavo Castillo Mattasoglio
Carlos Luján Valladolid
Daniel Nicholas DiNardo
Eduardo Contreras Gutiérrez
Francisco Javier Chavolla Ramos
Franz-Josef Overbeck (Alemania)
Guillermo Schulenburg Prado
Jean-Claude Hollerich
Jorge Raúl Villegas Chávez
José Alejandro Solalinde Guerra
José Antonio Fortea Cucurull
José Guadalupe Martín Rábago
Joseph William Tobin
Kevin Joseph Farrell
Luis Ángel Hernández Solís
Marcial Maciel Degollado
Melitón Rivera (†) (Templo Expiatorio de León)
Patrick O'Connell Kelly
Pedro F. Núñez
Pedro Flores Sánchez
Raúl Muñoz Franco
Robert Walter McElroy
Roberto Octavio González Nieves
Rodrigo Aguilar Martínez
Theodore Edgar McCarrick